Pues sí, ayer nos volvimos a reunir unos cuantos (pocos para lo que hubiese sido deseable) de los que en su día iniciamos nuestros estudios en el Seminario Diocesano de El Burgo de Osma.
Tras el reencuentro y saludos iniciales, así como una pequeña hidratación (que ya calentaba y no hay que descuidar este aspecto), nos dirijimos al Seminario dónde, muy amablemente y con gran paciencia, el rector, Jesús Florencio Hernández Peña, nos enseñó cómo ha cambiado por dentro el edificio que conocimos hace 50 años y en el que pasamos muchos días de nuestra infancia y adolescencia.
La verdad es que hay que agradecerle al sr. rector su dedicación en esta tarea en la que, en varias ocasiones, tuvo que tirar de alguno de nosotros que no nos resistíamos a ver dónde estaba la habitación que ocupamos, dónde el aula, dónde el despacho del rector, dónde la clase de ciencias (la de los "animales"), etc., etc..., alguno, incluso, quiso llamar por teléfono (de los de antes....)
El patio nos pareció pequeño, en comparación con el recuerdo que teníamos de entonces...
Y esta es la puerta principal, después de la reforma que se hizo hace como dos años...
También visitamos la capilla del Seminario, dónde hace 6 años nos hicimos la famosa foto que preside el blog, y, aunque fuésemos menos que entonces, dejamos constancia de nuestro paso por la misma...
Y, después de otra ración de líquidos hidratantes, nos fuimos a comer, muy bien, por cierto...
Y, como no puede ser de otra manera, terminamos con las "aguas tónicas", sentados en la plaza de la Catedral, en la terraza de nuestro buen mesonero de Casa Pacheco, dónde se nos unió Abel Mateo, que no pudo estar con nosotros el resto del encuentro.
Tras lo cual, después de una agradable sobremesa bien regada con las "aguas tónicas", nos despedimos hasta el próximo año... sí hasta el próximo año, que ya tenemos fecha para ello: el 8 de agosto de 2020, en Vinuesa.
Así que ya lo sabéis: ¡id haciendo hueco en las agendas, que tenemos nueva cita programada!
(Cuando esté más inspirado y tenga más tiempo, os iré contando más cosas).
De momento, ¡eso es to..., eso es to..., eso es todo, amigos!
Un abrazo.
