Pues sí, aunque os parezca mentira, tal y como os decía en la última entrada, sigo aquí, y me sigo acordando de vosotros. Por eso, hoy os felicito a todos, ya que es el primer aniversario de nuestro reencuentro después de cuarenta años.
Quisiera tener más tiempo para poder dedicarle al blog, cuando menos, una hora a la semana, pero la vida es lo que es, y nos va dando un golpe tras otro. Pero para eso estamos, para prepararnos como boxeadores y aprender a encajar y esquivar los golpes. Y a devolverlos....
No quiero aburriros con mis penas, así que iré al meollo del asunto.
Sixto, Tomás, y a todos los demás que entráis de manera anónima o que no dejáis comentarios en el blog, me acuerdo mucho de vosotros y estaría muy bien volver a reunirnos. El problema para mí es, de momento, mi falta de tiempo para poder dedicarme a reuniros a todos.
¡Pero eso no es excusa para todo aquél que quiera o haya querido que nos volvamos a reunir! Os remití a todos las direcciones, teléfonos y e-mails de todo el mundo, por lo que bien podrías haberlo hecho. Sé, por propia experiencia, que no es fácil y que hay que dedicarle tiempo... y ganas. Y que cuánto más tiempo pasa, más difícil se hace el volver a retomar la ilusión, vencer los impedimentos, etc.
No obstante, os quiero recordar que
Abel Mateo, a finales del año pasado hizo una propuesta de reunirnos en Bayubas, al amor de la lumbre baja, en su particular comedor matancero y degustando los productos típicos de la matanza y regados con los caldos de su bodega. Ahí podríamos habernos enganchado todos a su propuesta (o aquellos que hubiesen podido, o querido, o....).
No os sintáis ninguno ofendido, simplemente quiero dejar constancia de que las circunstancias son las que mandan y de que todos tenemos en nuestras manos los medios para poder reeditar el reencuentro. Yo, por mi parte, si mis circunstancias familiares mejoran, me pondré a ello, o a echar una mano a quién se decida a organizarlo. Porque esa es otra: la infraestructura, la información y localización de todos y cada uno está hecha, con lo cuál, creo que la parte más difícil del tema está resuelto, así que, el que se anime, que organice la próxima, que no tiene que ser necesariamente en El Burgo. Como muy bien decía Abel, cada año nos podemos reunir en un sitio diferente, en el pueblo del que sea, en la ciudad dónde viva cada uno (proponernos Irlanda, EE.UU. o México me parece un poco atrevido, de momento)....
Espero que guardéis un grato recuerdo de aquél día 10/08/2013 y que os quedáseis con ganas de volver a reunirnos. Yo, os puedo asegurar, disfruté mucho ese día y fue un verdadero placer volver a reunirme con todos vosotros. Espero que el próximo año volvamos a reunirnos.
Y, aunque no os lo creáis, ¡todavía me quedan fotos por subir......!
Os pongo una pequeña ración (fotos individuales que hizo Sixto):
Por cierto, ¿sabéis que nuestro compañero -que no pudo asistir al reencuentro por motivos de trabajo-
Jesús María Muñoz Monge, se nos ha ido con los señores franceses? Está por allí con una de sus exposiciones de fotografía y no sé si se afincará por allí o qué hará.
Bueno, lo dicho, que me voy por los cerros de Úbeda: ¡¡¡¡¡MUCHAS FELICIDADES A TODOS!!!!!
Un abazo
José A. Caamaño