Vamos, hombres, que ha llegado el buen tiempo, ha dejado de llover, parece que el sol va calentando y nos vamos alegrando todos un poco más. Animaros y participad. Y, sobre todo, no me seáis rácanos y, ¡contestad! los que aún no lo habéis hecho, si váis a poder venir o no el 10 de Agosto.
Bueno pues hoy os voy a dejar otra foto que me mandó José Ramón Recaha:
Como véis, sigue siendo de fútbol. Alguno se está haciendo cruces intentando averiguar quién era el que hacía las fotos. Algunas creo que las hacía Jesús del Pino, el señor que estaba impedido de una mano y un pie. Pero hay algunas que, tomadas en las circunstancias que están tomadas y en los lugares en que se dearrrollan, tuvo que ser alguno que tuviese cámara de fotos. ¿Os acordáis de quién o quiénes pudieron ser los retrateros-afotadores?
Eso sí, Tomás aparece en todas, aunque sea de masajista o para llevar el botijo, pero estar, estaba. Y lo más raro de todo, que casi no me explico, es que él no me haya mandado esta foto, que no figure en su fondo gráfico. Raro, raro, raro........
Bueno, pues nada, que paséis un buen domingo y los que ya habéis acabado (profesores, maestros) a disfrutar de las vacaciones. Los demás tranquilos, que todo llega, incluso que os ponga algún extracto de la revista AFÁN de ese curso.
¿Por qué me sonaba a mí tanto esa foto? Pues porque Javier Andrés me había mandado otra, de la misma formación futbolera, pero distinta toma. Si cuando digo que había más de un retratero-afotador no estoy desencaminado, no. Aquí os la vuelvo a poner:
¿Por qué me sonaba a mí tanto esa foto? Pues porque Javier Andrés me había mandado otra, de la misma formación futbolera, pero distinta toma. Si cuando digo que había más de un retratero-afotador no estoy desencaminado, no. Aquí os la vuelvo a poner:
Un saludo.
José A. Caamaño